Zawadi y la olla bailarina. Hola, pequeña oyente. Esta es la historia de Zawadi, una niña que amaba 2 cosas más que nada en el mundo, bailar y el delicioso guiso de su mamá. Una tarde soleada, Zawadi escuchó música que llegaba del exterior. Sus pies empezaron a zapatear, sus brazos empezaron a balancearse, tenía que bailar.
Narradora:Bailó junto a las gallinas, bailó alrededor del árbol de mango, y antes de darse cuenta, Zawadi ya había llegado bailando a la cocina, donde la olla de guiso de mamá burbujeaba suavemente sobre el fuego. Zawadi se detuvo y se quedó mirando maravillada. La olla de mamá también baila. De hecho, la olla se mecía suavemente sobre las llamas mientras el vapor se arremolinaba como bailarines dando vueltas. Apuesto a que el guiso le encanta bailar igual que a mí, rio Zawadi extendió la mano, lista para girar con la olla danzante, cada vez más cerca.
Narradora:De repente, ay, gritó. Su dedo había tocado el lado caliente de la olla, Retrocedió de un salto con los ojos abiertos de sorpresa. ¿Por qué me mordió la olla, bailarina? En ese momento, un pequeño ratón marrón se asomó por detrás del estante de la cocina y chilló. Cuidado, cuidado, las ollas bailarina no son bailarinas amigables.
Narradora:Zawadi se frotó el dedo suavemente. ¿Por qué no? El pequeño ratón la dio la cabeza moviendo sus bigotes, porque las ollas bailarinas están calientes, calientes, calientes. Bailan con fuego, son hermosas, pero son peligrosas si te acercas demasiado. Zawadi asintió lentamente, comprendiendo ahora.
Narradora:¿Las ollas calientes no son buenas parejas de baile? Para nada, chilló el ratón de nuevo. Si quieres bailar, elige siempre parejas que sean geniales, como tus amigos, tu mamá o incluso un ratón tonto como yo. Zawadi rió a carcajadas, lo recordaré. Desde ese día, a Zawadi le siguió encantando bailar, pero cuando bailaba cerca de ollas y fogatas, se aseguraba de mantenerse a una distancia prudencial, dando vueltas a su alrededor y, a veces, si escuchaba atentamente, creía oír al pequeño ratón chillar al ritmo de la música.
Narradora:Cuidado, cuidado, las ollas están calientes, baila con cuidado, lejos de la olla. ¿Bailarás con cuidado como Zawadi hoy? Recuerda, mantente alejado de todo lo que baila con fuego.